24 mar 2006

En la entraña del tiempo



El tiempo cede

y entreabre

su delicada profundidad. (Puertas

que unas a otras protegen, que unas en otras entran; huellas

rastros de mar.) Un otoño

de leños y hojarascas. En su fondo:

la espesura translúcida del placer; sus hiedras íntimas:

oro:

foliaciones de luz: fuego que enraiza en el metal florecido,

y un musgo fino,

incandescente.



Coral Bracho