24 ene 2007

Un par de poemas de un poeta de fuelle, Otoniel Guevara (Quetzaltepeque, 1967), una de las voces más poderosas de Mesoamérica. Salud y luz desde aquí.


PENA

Este día me levanté desmesuradamente tarde
Me vi las manos
Revisé mi esqueleto
El horizonte no tenía sentido
El sol quemaba los techos de las casas
En la calle
ni los perros ni los panaderos quisieron relatarme
de qué manera murió el amanecer

(De
No apto para turistas, 2004)


***


NO APTO PARA TURISTAS

Qué escalofriante el infierno del que ama
Macabra
su noble efervescencia de condenado

Enfila alegremente hacia el suplicio
Entrega el corazón lleno de alas

Sus ojos se extraviaron para siempre
contemplando la belleza
de un paraíso
tan solo prometido


(De No apto para turistas, 2004)